Yo no fui a la inauguración.... no me gustaban los Beatles....ni los había escuchado. Pero Ariel, mi hermano, sí. Ese sí estuvo allí. Y luego lamenté no haberle acompañado cuando supe que Fidel había estado.
Pero esas cosas de hermanos.....Resulta que a Ariel no le gustaba la pelota.....y se fue conmigo al Latino a ver Villa Clara frente a Industriales a cambio de mis primeros contactos con los Beatles y Lennon. Accedí. Y fue así que aprendí a diferenciar a los 4 peluítos... Y pasé por amar a Ringo, luego a Paul hasta que la relación final la he mantenido todos estos años con Lennon, sin permiso de Yoko... Claro, cuando conocí más de ellos, amé la guitarra de Harrison.
Han sido no pocos años. Hoy soy beatlemaniaca, con hijo beatlemaniaco amigo del Guille Vilar, y visito al más revolucionario de los 4 cada vez que puedo.
Hoy hace 40 años que mataron a Lennon. Lo mató el capitalismo... y lo mató por el temor que tenía a su verdad, lo mató por el miedo a la revolucionaria influencia que tuvo....y tiene. Y lo mató creyendo que lo mataría....y no pudo.
La poesía de la revolución humana tendrá siempre en los soñadores un horcón que resiste lo humano y lo divino.
Por eso nos fuimos a caminar nuestro pedacito de Abbey Road y a conversar un ratico...tan de sorpresa, que ni tiempo le dimos a ponerse los espejuelos:
-Quédate así....que somos de la casa...
Y dejamos caleidoscópica constancia.
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